"Como lluvia fina sobre la tierra". Así es el trabajo de los misioneros, un trabajo constante, callado, que apenas se nota, pero moja, ¡vaya si moja!. Millones de personas en el mundo tienen la dicha de compartir con ellos cada día y de recibir su cariño y comprensión. Millones de personas son testigos de su misericordia, esa misericordia que nos trae Dios y que el Papa Francisco ha decidido dedicarle un año santo que comenzará en breve.
¿Eres tú un misionero de la misericordia?